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Musica Illustrata, Jakob Viñas & José Fraguas

Sentido y sensibilidad

Enero 2022

El viernes 10 de diciembre, se presentó en la Sala de Cámara del Auditorio Nacional de Música en Madrid, el Ensemble Musica Illustrata, dirigido por Jakob Viñas, con la participación del violinista José Fraguas. Concierto patrocinado por la Fundación Amour Des Vies, cuyos beneficios fueron destinados a la investigación sobre los efectos y secuelas del virus en músicos y cantantes: para apoyar la investigación MUSICSARS-COV-2.

El Ensemble está formado por músicos con una media de edad que ronda los 30 años, contando en sus filas con profesores de conservatorios superiores o bien profesionales que están en activo en otras agrupaciones del país. Según explican en su página web, se centrarán en conciertos en directo para ser grabados del repertorio barroco hasta el siglo XX, concentrándose especialmente en el Barroco y el Clasicismo.

El repertorio de este concierto, que anunciaba algunas de las obras más populares de la música clásica de todos los tiempos, como son la Serenata Nocturna de Mozart o Las Cuatro Estaciones de Vivaldi, era a priori una propuesta atractiva por la calidad de las obras, pero también era una propuesta muy arriesgada. Son obras con las que cuesta sorprender a un público conocedor y muchas veces acaban siendo, como cuando las grandes orquestras internacionales presentan sus giras en España, conciertos de paso, en los que se hace una lectura más o menos agradable de obras famosas y en los que los espectadores van a pasar un buen rato con una orquestra o ensemble que tocará de manera solvente. Los músicos no esperan dar más y los espectadores también esperan pedir más. Se pide solo solvencia.

Concierto sorprendente

Pero este concierto nos sorprendió por varios motivos. En primer lugar, por la manera inusual de abordar las obras, con una lectura donde cada compás parecía haber sido estudiado desde todos los ángulos posibles hasta dar con el más apropiado. Después, por el gran nivel técnico que demostró el ensemble que, con su sonido y cohesión, parecía más bien una agrupación con muchos años de experiencia que no que estuviera haciendo su debut en ese mismo concierto. Sonaba como si la sala tuviera en su escenario no a 16 músicos, sino a una gran orquestra. Y por último por los dos protagonistas de esa noche: Jakob Viñas y José Fraguas.

Fraguas brilló en su parte solista de Vivaldi y como concertino del ensemble. Pero vamos a comentar con más profundidad lo que acaeció en el concierto. En la Serenata de Mozart, el director, que dirigió todo el concierto sin partitura, ofreció una versión llena de matices y colores. Nos recordó a Carlos Kleiber por su perfección técnica, profundidad y sensibilidad musical. Una interpretación que nos llevó al Mozart de la última época, de “madurez”, cuando estaba componiendo Don Giovanni.

Siguió un interesante estreno de Francisco Estévez. Hacía tiempo que no oíamos a este compositor en el Auditorio Nacional. Se trata de una obra en homenaje al Lacrimosa del Requiem de Mozart. El compositor se encontraba presente y saludó a los intérpretes y al público.

Aunque todos hemos escuchado Las Cuatro Estaciones de Vivaldi en multitud de ocasiones, sonaron con una nueva vida. El bello sonido del violín nos transportó a un viaje por los cambiantes ambientes y estaciones del año. José Fraguas deslumbró y hubo momentos en que creíamos escuchar a Yehudi Menuhin.

El concierto continuó con una versión del Air de la Suite para orquesta n. 3 de Bach, un movimiento en tonalidad mayor que enseguida se ensombrece con acordes de tonalidad menor, mostrando el dramatismo interno de Bach, como así lo expuso el director, creando una interpretación de gran impacto, para acabar con un bis de Vivaldi que se ganó definitivamente a todo el público puesto en pie.

Conocemos bien la carrera de José Fraguas y nos parece que en este concierto ha dado un gran salto en su madurez musical. Esperamos con gran interés los próximos conciertos de este joven violinista, que ya es una sólida realidad. Fue una sorpresa inesperada ver a un director Weltklasse como Jakob Viñas. Destacar igualmente el entusiasmo de toda la audiencia. El público de la música clásica sigue vivo, con un gran futuro y necesita más conciertos de alta intensidad musical como este.

Y, por último y no menos importante: este concierto se grabó en audio y video. Cuando aparezca, no se lo pierdan.

por Silvia Pons 

Viernes 10 de diciembre
Sala de cámara del Auditorio Nacional
Ensemble Musica Illustrata
Jakob Viñas, director José Fraguas, violín

Bach - Air
Mozart - Serenata Nocturna
Francisco Estévez - Lacrimosa (estreno mundial)
Vivaldi -
Las Cuatro Estaciones

Foto: Concierto del ensemble Musica Illustrata, Jakob Viñas y José Fraguas en el Auditorio Nacional de Música en Madrid, el pasado mes de diciembre.
Crédito: © Noah Shaye

 

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