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Alberto Mesirca

La guitarra de hoy para Vicente Asencio

Septiembre 2020

Ganador en tres ocasiones de la Guitarra de Oro en la Convención Internacional “Pittaluga” de Alessandria; investigador incansable del repertorio antiguo y contemporáneo para las seis cuerdas; dedicatario de obras de importantes compositores como Leo Brouwer, Dusan Bogdanovic y Angelo Gilardino; colaborador de grandes como Marc Ribot y Vladimir Mendelssohn; editor de manuscritos renacentistas antes desconocidos (Fantasias de Francesco da Milano desde el Manuscrito de Castelfranco Veneto, 1565), Alberto Mesirca nos presenta su último trabajo sobre la obra completa para guitarra sola de Vicente Asencio.

¿Cómo nació su interés en la música de Vicente Asencio?

Vicente Asencio es un compositor extremamente interesante en el panorama musical español del siglo XX. Su poética se acerca a la del gran Maestro catalán Federico Mompou, intimista por un lado y armónicamente influida por los impresionistas franceses, Ravel y Debussy. Su estética musical puede ser expresada en la imagen que el poeta místico renacentista San Juan de la Cruz selló en su Cántico: “la musica callada, la soledad sonora”. Es una visión profunda del sonido, muy interiorizada y donde el sentido del silencio es tan importante como el sonido mismo, que empieza y termina en el silencio. El otro lado interesante de su filosofía musical es la elección de un material temático que pertenece propiamente a su tierra, Valencia. Es una manera de entender el provincialismo muy parecida al concepto elaborado por García Lorca, de “andalucismo universal”, donde el término “provincial” no es sinónimo de ausencia de cultura, ni retraso, sino el núcleo de una cultura ancestral y antigua que continua, a pesar de los cambios en las varias épocas. Esta concepción se expresa también en su estilo musical. En una entrevista para el diario Levante de 1962, dijo: “Soy un músico actual; aunque no todas las corrientes actuales me interesan. Soy un músico tonalista; creo que el movimiento actual atonalista es interesante como movimiento de intento renovador; […] no creo que a nosotros, los mediterráneos, con nuestro temperamento, nos vaya bien su estética, porque el dodecafonismo es un movimiento especialmente cerebralista y nosotros somos sustancialmente intuitivos”.

¿Cómo se desarrolló el trabajo de la grabación?

El primer paso fue la investigación musicológica. Tengo la suerte de conocer y trabajar con el eminente Maestro Angelo Gilardino, dedicatario de una obra maravillosa de Asencio, la Suite Valenciana, que me aconsejó mucho para la interpretación de la obra; y con David Eres Brun, guitarrista y compositor de Valencia, que tiene un contacto directo con la heredera de la familia Asencio, Matilde, que he tenido el honor de conocer. Eres Brun me sugirió concentrarme sobre las obras menos conocidas del Maestro, y me facilitó una obra juvenil, de los años treinta, Canço d’Hivern, que si bien no está caracterizada por el minimalismo demacrado de su obras de madurez, como el maravilloso segundo movimiento de su Suite Mística, “Dipsô”, tiene ya algunas características propias de su idioma musical.

¿Y tras lo musicológico?

Este segundo paso fue el trabajo interpretativo sobre la música, largo y complejo. Había grabado hace diez años la Suite Mística para mi primer CD (Ikonostas, ganador de la Guitarra de Oro como mejor disco del año para la Convención “Pittaluga” de Alessandria, n.d.r.), y después de muchos años, ahora creo tener una concepción más profunda de su obra. Muchas comparaciones se han hecho con otras grabaciones históricas, como las de los dedicatarios de la mayoría de sus composiciones, Narciso Yepes y Andrés Segovia, para encontrar una línea de interpretación fiel a un pensamiento musical cercano a Asencio y enriquecido por una aportación personal, que espero pueda ser interesante.

Es obvio su interés en la cultura española… ¿Qué relaciones tiene con el mundo cultural español?

He tenido la suerte de tocar a menudo en España. Las primeras experiencias fueron gracias a los Institutos Italianos de Cultura de Barcelona y Madrid (concierto grabado y transmitido por RNE), y posteriormente para el Festival Via Stellae en Santiago de Compostela, con la mezzo Romina Basso; la Semana Tárrega de Valencia o el Festival Ikebana de Oviedo. Además mantengo una relación de amistad con maravillosas personas de la Fundacion Tres Culturas de Sevilla, Olga Cuadrado y Alejandro Luque, por los cuales he tocado en Sevilla. En esta ciudad tengo una otra amistad profunda con Miguel Angel Cuevas, profesor y poeta, que he conocido gracias al amigo escultor Massimo Casagrande; con ellos hemos hecho varios proyectos interculturales (el último es un homenaje a Jorge Oteiza y al Padre Donostia, figuras increíbles de la cultura vasca). Espero naturalmente seguir tocando en este maravilloso país y hacer investigaciones sobre una cultura que tanto amo y crear colaboraciones con artistas españoles, que creo pueden ser potencialmente unos de los aspectos más interesantes en el panorama cultural europeo.

por Lucas Quirós

www.albertomesirca.com

Foto: El guitarrista italiano Alberto Mesirca ha grabado la obra completa para guitarra del valenciano Vicente Asencio.
Crédito: © Giulio Favotto

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