Siempre me pregunto cuál es la razón por la que la música vocal barroca se nos ofrece con cantantes que parecen alumnos aventajados recién salidos del conservatorio, sin embargo en esta ocasión hemos escuchado el oratorio póstumo de Haendel, Jephta, interpretado por cantantes imponentes que nos han brindado las maravillas de la obra con toda su belleza e intensidad.
Abrió la velada el imponente bajo-barítono Cody Quattlebaum, un verdadero doble del autorretrato de Durero, como Zébul, poseedor de una voz sonora pero carente del estilo idóneo para este tipo de repertorio y una afinación que dista de ser la apetecida
Hamor el enamorado de Iphis, la hija de Jephta, tuvo en la mezo Jasmin White una magnifica interprete, brillante en sus coloraturas y poseedora de graves bellísimos, que le permitieron lucirse en su aria « On me let blind mistaken Zeal ».
Como Iphis, la soprano Mélissa Petit, cumplió con musicalidad sus intervenciones, aunque se trate de una cantante con más técnica que personalidad, caracterizando su personaje con un excesivo infantilismo. Destaco su afinación en «Tune the soft melodious lute » bastante menos en « Happy they» y no supo emocionar, aunque la resolvió sin problemas « Farewell, ye limpid springs »
Excelente en su única intervención Anna Piroli como el Angel.
Joyce DiDonato, como Storgé, la mujer de Jephta, mostro un cierto deterioro boca pero su magisterio como cantante prevaleció en « Scenes of horror » que fue una verdadera lección de suprema técnica, de la que ofreció otro momento casi sublime en « Let other creatures die »
Pero el rey del concierto fue el baritenor Michael Spyres , como Jephta, que mostro poseer una voz de una extensión casi prodigiosa que sabe utilizar para dotar al personaje de todos sus diversos estados anímicos, asombroso en « His mighty arm » y en su ardor guerrero en « Open thy marbe jaws » En conjunto una interpretación magnífica.
Aun así todo hubiese sido menos brillante si no hubiese contado con Francesco Corti, al frente de los coros y orquesta de Il Pomo d’Oro que fue una exhibición de como imprimir vivacidad a una obra sin caer jamás en el tedio y aprovechando las virtudes de un coro y de una orquesta brillante en todas sus secciones pero sobre todo en las cuerdas y en el viento.
Un festín musical.
Francisco Villalba
Dirección musical: Francesco Corti
Michael Spyres – Jephtha; Joyce DiDonato – Storgé; Melissa Petit – Iphis; Cody Quattlebaum – Zebul; Jasmin White – Hamor; Anna Piroli - Angel
Il Pomo d'Oro
Teatro Real, Madrid.
Foto © Javier del Real | Teatro Real