Es Stéphane Degout un barítono cuya voz escapa un tanto a las coordenadas de un cantante de su cuerda en italiano y que tampoco se puede incluir en las aterciopeladas untuosidades de un cantante de su cuerda de un francés. Quizá es lo que en Francia se denomina un barítono Martin; como ejemplo sirva el Pelléas de la ópera de Debussy. Sus cualidades le permiten pasar sin esfuerzo por diversos repertorios, no siempre franceses, con una inusitada facilidad.
Comenzó el recital en el Ciclo de Lied, junto con el pianista Cédric Tiberghien, con el Liederkreis, op.39 (1840) de Schumann, con textos de Joseph von Eichendorf, el escritor romántico alemán nacido en Polonia cuyos poemas fueron puestos en música por Schumann, Strauss, Brahms, entre otros. Schumann, merced a su explosiva vena romántica, supo recrearlos con una música bellísima y un canto conmovedor. Degout, con el armamento bocal del que dispone, se aproximó a estas creaciones con un acierto inusitado; su voz, de timbre tenoril, supo adaptarse a la desbordada pasión alemana de Schumann con una habilidad muy destacable porque supo adaptarse a la viril eclosión de Schumann con refinamiento francés pero sin traicionar su contenido germánico.
Después nos ofreció del poco conocido músico simbolista Guy Ropartz, los Quatre poèmes d’après l’«Intermezzo» de Heinrich Heine, IGR 54 (1899) en los que la dulzura de su voz, los exquisitos pianos y la austeridad de su canto quedó de nuevo en evidencia.
Pero lo mejor de la velada vendría en la segunda parte con obras de la francesa Rita Strohl, con tres de las Six poésies con textos de Baudelaire, para continuar con obras de Ravel que concluían con las maravillosas Don Quichotte á Dulcinée, con las que tanto Degout como Tiberghien dieron una lección de estilo. Degout hizo gala de un timbre noble, agudos sin mácula, y fortes poderosos, sin caer en exageraciones fuera de lugar en el repertorio francés. Para finalizar le escuchamos las Trois ballades de François Villon con las que dio una verdadera lección de estilo y refinamiento. Una velada relajante y bella.
Stéphane Degout (barítono). Cédric Tiberghien (piano).
Obras de Schumann; Guy Ropartz; Rita Strohl; Ravel; Debussy
Ciclo de Lied, CNDM.
Teatro de la Zarzuela, Madrid.
Foto © Elvira Megías