Música clásica desde 1929

#Lecturasdeverano #LasMusas #Opinión / Emiliana de Zubeldía - por Sira Hernández

07/09/2025

Como #lecturasdeverano proseguimos publicando en abierto la sección #LasMusas, hasta ahora solo en papel, donde las mujeres escriben sobre mujeres, una tribuna libre mensual donde rescatar la figura de compositoras, cantantes, instrumentistas, profesoras, musicólogas, directoras, etc. En esta ocasión publicamos la realizada para la revista de febrero de 2025 por Sira Hernández.

 

Emiliana de Zubeldía

Elegancia y refinamiento

por Sira Hernández *

 

Es un placer poder escribir sobre Emiliana de Zubeldía, una mujer que supo llevar una brillante carrera como pianista, pedagoga y compositora en una época donde era todavía muy difícil desarrollar estas actividades, siendo mujer. Tuve el honor de ofrecer un recital en el País Vasco recientemente, en el tercer ciclo de Batura, el Festival sobre Mujer y Música Vasca, con alguna de sus preciosas obras para piano. Es cuando pude conocer más en profundidad su dilatada trayectoria vital y su brillante trabajo como compositora, investigando sobre su vida, quedándome gratamente sorprendida por el inmenso volumen de obras y la calidad de esta compositora tan poco conocida.

Emiliana de Zubeldía, que también se hizo llamar artísticamente Emily Bydwealth, nació en Salinas de oro (Navarra), el 6 de diciembre de 1888, falleciendo en Hermosillo, Sonora (México), el 26 de mayo de 1987, tuvo una dilatada vida y carrera musical. Fue la octava de los nueve hijos del matrimonio integrado por Antonio Zubeldía Elizondo y Asunción Inda León. Era hermana de Martín Zubeldía, el fraile capuchino conocido como “Gurmesindo de Estella”, también compositor. Emiliana dio su primer recital a los cinco años de edad, interpretando una pieza compuesta por su hermano.

Comenzó sus estudios musicales en Pamplona, en 1896, donde se habían mudado sus padres, primero con José Ezkurra y posteriormente en la Escuela Municipal de Música, con el profesor Joaquín Maya. En 1904 continuó sus estudios en Madrid, en el Conservatorio Nacional, culminándolos allí con sobresaliente en 1906, para seguir luego en París, en la reconocida Schola Cantorum, donde cursó composición con el célebre Vincent d’Indy y piano con la gran Blanche Selva, sin necesidad de hacer examen de admisión. Desafortunadamente, tuvo que dejar sus estudios en 1909, tras la muerte de su padre, regresando a Pamplona, donde empezó a dar clases de piano, fundando allí una escuela de música, mientras realizaba numerosos conciertos, igual que en Biarritz, San Sebastián o Madrid, obteniendo muy buenas críticas. Por esa época publicó sus primeras obras como compositora en la editorial Arilla y Cía.

En 1919 contrajo matrimonio con el químico toledano Joaquín Fuentes Pascual y, un año después, ingresó en la Academia Municipal de música de Pamplona como auxiliar primera de piano. Dos años después se separó de su marido y volvió a París, donde continuó sus estudios de composición con Marie Joseph Léon Désiré Pâque, mientras mantenía su actividad concertística y publicaba algunas obras, nada menos que en la editorial Max Eschig. También trabajó como pianista de ensayos en óperas de Ravel y Stravinsky. Tras el fallecimiento de su madre en 1927, Emiliana viajó a América, y nunca más volvió a Pamplona.

En una gira en 1928 se presentó en Sao Paulo, en Brasil, con obras de Albéniz, Granados y Falla, así como con alguna obra suya, obteniendo un gran éxito. Meses más tarde llegó a Montevideo y en 1929 se presentó en Buenos Aires, hasta que en 1930 llegó a Nueva York, donde entró en contacto y se relacionó con los célebres Andrés Segovia y Nicanor Zabaleta, con quienes ofrecía charlas sobre música española en el Radio City Music Hall, y donde acababa de llegar también el teórico musical mexicano Augusto Novaro.

Emiliana quedó inmediatamente fascinada por sus novedosas teorías de la música, basadas en sus experimentos relacionados con el Sistema Natural de Música. En Nueva York ofreció numerosos recitales interpretando música vasca y composiciones adecuadas a los nuevos instrumentos creados por Novaro. Estaría cuatro años más en Nueva York y en 1937 se mudó a Ciudad de México, donde vivió los siguientes 10 años, ejerciendo de pianista y compositora, hasta que en 1939 sufrió un accidente de tráfico que le retiró de los escenarios.

Adoptó la ciudadanía mexicana en 1942 y en 1947 fue invitada a dirigir la escuela de música de Sonora, perteneciente a su Universidad, en la ciudad de Hermosillo. Durante esos años de intensa actividad se dedicó a la divulgación, enseñanza y organización de conciertos y conferencias, estrenando la que pudiera ser su obra más importante, la Sinfonía Elegíaca, en 1957, dedicada a su hermana Eladia, fallecida en 1939. En ese año y con esta obra ganó el Premio Nacional de Composición.

En 1960 falleció el maestro Novaro y Emiliana continuó entonces sus labores de enseñanza y promoción de la cultura musical, destacando su labor como directora de coros, fundando el Coro de la Universidad de Sonora, todavía vigente, que estrenó su Misa de la Asunción, compuesta durante la Semana Santa de 1968, entre otras obras, en la presentación de las Olimpiadas de México de 1968. Durante la década de los setenta, a pesar de que Zubeldía empezaba a tener problemas de salud por su edad, no paraba de recibir reconocimientos y participar en actos culturales de gran relieve.

Emiliana de Zubeldía compuso 42 obras para piano, 7 de cámara, 14 sinfónicas, 32 para voz y piano, 19 para coro, más 42 arreglos de temas ajenos. Su estilo presenta unas características formalistas estrictas y otras más vanguardistas, a la búsqueda siempre de nuevos recursos musicales. En su obra tuvo mucho peso la música religiosa, como lo demuestra la Misa de la Asunción que ya hemos citado. Elegante y refinada, con un pronunciado sentido rítmico, su obra como compositora es sin duda de las más destacables y creativas de esta época.

 

* Pianista y compositora de carrera consolidada, ofrece recitales habitualmente y ha grabado obras propias, de Mompou o de Soler, entre muchos otros.

www.sirahernandez.com

 

Imagen: Foto autógrafa de la pianista y compositora navarra Emiliana de Zubeldía.

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