ABAO Bilbao Opera clausura en mayo su 73ª Temporada con Otello, de Giuseppe Verdi, una década después de su última representación. Es un título imprescindible, penúltima ópera del compositor, cuya fuerza musical arrebatadora e incesante, la atraviesa desde el primer compás.
Se han programado cuatro funciones para los días 17, 20, 23 y 26 de mayo en el Euskalduna Bilbao con el patrocinio exclusivo de Kutxabank. La representación el sábado 17 dará comienzo a las 19:00h, y el resto de las funciones se iniciarán las 19:30h.
En esta historia trágica e inmortal, el amor, los celos, la envidia, el racismo, la ambición desmedida, la manipulación y el engaño, se entrelazan en la segunda de las tres incursiones de Verdi en el universo de William Shakespeare, tras la magistral adaptación de Macbeth y antes de Falstaff. Devoto conocedor del autor inglés más universal, trabajó junto a su libretista Arrigo Boito para condensar la obra original y que la historia narrada transcurriera en pocos días. El estreno de la ópera en la Scala de Milán fue un éxito rotundo que se extendió rápidamente por todos los grandes teatros de Europa.
UNA ÓPERA DE MADUREZ, CULMEN DEL DRAMA MUSICAL VERDIANO
Considerada una de las grandes obras maestras de Verdi, Otello es una tesis profunda sobre la oscuridad de la naturaleza humana, el influjo de la manipulación y la devastadora tortura de los celos. La ópera destaca singularmente por su intensidad dramática y por la complejidad de sus personajes.
Jorge de León, Premio Talía 2023 al Mejor Intérprete Masculino de Lírica, encarna a Otello, uno de los roles más desafiantes para tenor heroico a la italiana, tanto vocal como dramáticamente. Las claves musicales asociadas a Otello reflejan su compleja personalidad y las diferentes emociones que experimenta a lo largo de la obra, como con el famoso «Esultate!» del acto I donde muestra su alegría y triunfo tras una victoria militar; el aria «Dio! mi potevi scagliar tutti i mali» del acto II, que expresa el retrato visceral y angustioso de los celos al creer que Desdémona le ha sido infiel, y la escena «Niun mi tema» del acto IV que refleja su desesperación y arrepentimiento antes de su trágico final.
Interpreta a la bondadosa Desdemona, la víctima de la tragedia en la que brillan las virtudes del amor puro, la fe y la compasión, la soprano albanesa Ermonela Jaho. Reconocida internacionalmente como una de las más grandes cantantes de nuestro tiempo, recientemente ha sido galardonada con el premio Oper! Awards a la Mejor Intérprete Femenina 2024. La protagonista tiene destacadas piezas que muestran a lo largo de la ópera su bondad e inocencia como la famosa «Canción del sauce», «O salce salce» en el acto IV, que refleja su tristeza y presagio de su destino; el «Ave María piena di grazia» también en el acto IV donde reza una oración antes de acostarse mostrando su pureza y devoción; o el aria «Piangea cantando nell'erma landa» en el acto III donde expresa su tristeza y resignación ante la creciente ira de Otello.
Jago, el antagonista de Otello, un personaje complejo y manipulador, está interpretado por el barítono italiano Claudio Sgura. Tiene arias y momentos que reflejan su naturaleza malvada y astuta como el explosivo «Credo in un Dio crudel» en el acto II donde expresa su creencia en un dios cruel y su visión escéptica del mundo. Es una de las piezas más oscuras y poderosas de la ópera. «Era la notte, Cassio dormiva», también en el acto II, donde relata a Otello un falso sueño de Cassio insinuando la infidelidad de Desdémona, o el dúo con Otello «Si, per ciel marmoreo giuro» en el mismo acto donde juran venganza contra Desdémona y Cassio.
Junto a ellos, el tenor vizcaíno Mikeldi Atxalandabaso como Cassio, el joven y leal oficial víctima de las intrigas y manipulaciones de Jago que lo convierten en falso amante de Desdemona, su dúo «Non ti cruciar» es fundamental para el desarrollo de la trama; la mezzosoprano Anna Tobella como Emilia, la ingenua esposa de Jago; el tenor Vicenç Esteve Madrid como el desesperado Roderigo, otra víctima de la maldad de Jago; el bajo Fernando Latorre que interpreta a Lodovico y el barítono José Manuel Díaz como Montano, ambos personajes de autoridad que representan la estabilidad y el orden.
FRANCESCO IVAN CIAMPA REGRESA A BILBAO AL FRENTE DE LA SINFÓNICA DE KIEV
La parte musical está a cargo del director italiano Francesco Ivan Ciampa, que se pone al frente de la Kyiv Symphony Orchestra para sacar el máximo partido a esta partitura que marca el punto más alto de la evolución del genio de Busseto.
La orquestación de Otello es rica, variada y llena de matices. Desde la energía brillante del «Esultate!», pasando por la instrumentación a veces sombría y poderosa que subraya la maldad de Jago, o intensa y emotiva en otros pasajes para reflejar la angustia y el tormento de Otello, hasta la melancolía serena de Desdemona.
Un Verdi en plenitud de su madurez creativa, ofrece una construcción musical perfecta y homogénea entre acción e instrumentación, con un discurso rico y sutil, ensamblando una exquisita narrativa sinfónica. Las escenas se suceden perfectamente integradas vocal y musicalmente con una textura amplia y equilibrada.
La Kyiv Symphony Orchestra (KSO) se ha consolidado como una de las principales figuras culturales de Ucrania. Reconocida por su dedicación a la preservación y promoción del patrimonio musical ucraniano, la KSO también desempeña un papel fundamental en la representación de la cultura ucraniana a nivel internacional. Desde 2023 cuenta con el patrocinio de la Filarmónica de Berlín y desde 2024 realiza una residencia en Alemania, en Monheim am Rhein, formando parte de Monheimer Kulturwerke GmbH.
El Coro de Ópera de Bilbao, dirigido por Boris Dujin, y el coro infantil de la Sociedad Coral de Bilbao dirigido por José Luis Ormazábal, completan el reparto vocal.
PRODUCCIÓN DE ABAO BILBAO OPERA, ELEGANTE Y SOFISTICADA
En el escenario una producción de ABAO Bilbao Opera, concebida por Ignacio García y estrenada en 2015. La escenografía cuidada, sobria y elegante de Gabriele Moreschi se presenta con una propuesta ambivalente entre lo clásico y lo moderno. Cuatro escenas diferenciadas y matizadas por elementos y detalles como el balcón o el gran espejo sobre la cama, propician una dirección escénica fluida y natural.
Esta propuesta se enriquece con los efectos de luz del reconocido Albert Faura, y el soberbio vestuario lleno de color y detalles suntuosos de Gabriela Salaverri. Ambos han sido recientemente galardonados con los Premios Ópera XXI 2025 al Mejor Diseño de Iluminación y al Mejor Diseño de Vestuario, respectivamente.
Al referirse a este trabajo Ignacio García ha señalado que, «la gran aportación de Giuseppe Verdi a la ópera del siglo XIX es su visión integral de un nuevo teatro y supone una revolución no sólo musical sino esencialmente escénica».