Música clásica desde 1929

Discos recomendados de Ritmo

En esta sección encontrará los 10 discos que la revista RITMO recomienda cada mes, clasificados por meses y por su orden de recomendación del 1 al 10. Se archivan los recomendados desde junio 2011, para ver anteriores ir a "Ritmo Histórico".
Haciendo "clic" en el título de cada disco o sobre la foto, accederá a su ficha y a la crítica publicada en Ritmo y, cuando es posible, a las diferentes tiendas donde podrá adquirir el disco físico, o a las plataformas digitales desde donde podrá escucharlo en "streaming" o descargarlo online.

Ritmo Diciembre 2021 - Núm. 956

GUBAIDULINA: Concierto para violín y orquesta n. 3. The warth of God. The light of the end.

Vadim Repin, violín. Orquesta Gewandhaus Leipzig / Andris Nelsons.
DG 0028948614578 (CD)



La crítica

La figura de Sofia Gubaidulina no ha hecho más que crecer artísticamente desde que DG la lanzó al estrellato musical internacional (en la URSS era una proscrita, de facto), en 1989, con la grabación de su primer Concierto para violín (Offertorium, 1980). En los años previos a la caída del muro su figura se asociaba con otros compositores soviéticos (Schnittke, Boris Tchaikovsky…) a los que, por suerte, ha sobrevivido.

Con 90 años recién cumplidos, DG celebra la efeméride con su Tercer Concierto para violín. Pasan los años, y muchas de sus señas de identidad se mantienen intactas. Un lenguaje ecléctico, pero reconocible. Una cierta obsesión por las temáticas espirituales (también presentes en las otras dos piezas que completan este disco, las orquestales The warth of God y The light of the end) y una soberbia construcción musical, siempre dotada de orquestaciones impactantes. Analizado su catálogo con perspectiva, transmite la misma sensación de solidez musical crepuscular que percibimos en las últimas obras de algunos grandes de su generación (como Lutoslawski o el citado Schnittke). Y, aunque en los textos que acompañan el disco no se comente, con la sensación de que en esta última parte de su carrera otro grande sigue muy presente en su pensamiento musical: Olivier Messiaen. Estamos ante un disco imprescindible.

Andris Nelsons y Vadim Repin sirven la obra de manera intachable (aunque quizás el segundo, con menos pasión generacional que Gidon Kremer, su principal paladín). Máxima recomendación.   

Juan Berberana

419
Anterior BACH: Kantaten n. 37 (Cantatas BWV 49, 65, 114).
Siguiente KAPRÁLOVÁ: Obras para orquesta y obras vocales (Waving Farewell).