Música clásica desde 1929

 

Críticas seleccionadas de conciertos y otras actividades musicales

 

Crítica - Nicolà Setaro, el constructor de utopías

A Coruña - 05/11/2018

La primeras noticias de la llegada de Setaro a A Coruña, nos llevan a 1764, procedente de Oporto, ciudad que le atraerá como enclave militar y administrativo, consiguiendo una licencia por tres años que incluía la construcción de un teatro.  También Santiago tendrá noticias suyas, avalado por el Conde de San Juan, ampliando a la organización de bailes de máscaras carnavalescos. Ferrol será un tercer eslabón, en donde pondrá en pie un coliseo con 29 palcos, 11 lunetas,  además de una cazuela superior. Volverá a A Coruña, en donde para dejar constancia de otro, mientras se reparte profesionalmente entre ambas ciudades.  La Orquesta Barroca de Mateus, pertenece a la fundación que la financia, dedicada a la recuperación de repertorios barrocos con atención al legado luso-brasileño, bajo la dirección de Ricardo Bernardes, especializado en música antigua y que amplia en sus labores de investigación. Siguió la docencia de Dinko Fabris  y Harry Crowl. Mario Pontiggia, fue el responsable de la dirección escénica, con una serie de maniquíes flanqueando la escena en círculo. Borja Quiza, barítono-relator, nos puso al día del curioso personaje, a tumbos por la Europa dieciochesca, mientras se superaba a sí mismo con sus proyectos inviables por presiones inevitables. Vivica, destacó en su línea habitual con el redondeo de las fioriture y la ductilidad en el canto spianato.

En el programa, dos oberturas para cada parte: Francisco A. de Almeida, con la introduzzione de su oratorio La Giuditta y la Sinfonía in Fa, de G.Latilla. Del veneciano Baldassare Galuppi, quien colaboró con C.Goldoni, de su ópera Il mondo della Luna, el aria de Ecclitico Voi lo sapete corre son fatte…, en la voz del   barítono, para dar paso a Vivica en varias arias. De Arsilda, Reggina di Ponto de A. Vivaldi, Io sento in questo seno. Del Alessandro de G.F. Händel, el aria de Rossanna Brilla nell´anima un non intenso. Más Händel  por el aria Lascia la spina, del oratorio Il triunfo del Tempo e dil Disignano. Vivaldi en La Fida Ninfa con el aria de Licori Alma oppressa.  De La Griselda, el aria de Constanza Agitata da due venti…, pura coloratura, y la de Irene Sposa son disprezzata, de Bajazet. El aria alternativa de Il Farnace, Gelido in ogni vena. Borja recobró presencia, en clave buffa por el aria de Uberto, sempre in contrasti, de La serva padrona de Pergolesi,  para pasar al recitativo y aria del Conde Ripoli Non vi dar`mia bella, de G. Scolari. El Mozart del Don Giovanni, muy a cuento para Borja, con Deh vieni non tardar, culminando Riccardo Broschi, el hermano de Farinelli, con el aria de Arbace de la versión de Londres Son qual nave ch´agitata, en la voz de Vivica.

Ramón García Balado

Amigos de la Ópera de A Coruña
Vivica Genaux, Borja Quiza.  Orquesta Barroca Mateus/ Ricardo Bernardes. Escena: Mario Pontiggia.
Obras de F.A. Almeida, A.Vivaldi, G.B. Pergolesi, Haendel, B. Galuppi y G.Latilla
Teatro Rosalía Castro, A Coruña.

Foto: La mezzosoprano Vivica Genaux.

536
Anterior Crítica - La herencia de cuatro culturas
Siguiente Crítica - De los archivos a la luz: una brillante recuperación histórica (CNDM)