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Críticas seleccionadas de conciertos y otras actividades musicales

 

Crítica / Atractivo programa (Orq. de Cámara Comunidad Valenciana) - por José Antonio Cantón

Alicante - 08/06/2021

Formando parte del VIII Ciclo ‘Nuestras Bandas y Orquestas’ organizado por el ADDA, el concierto de la Orquesta de Cámara de la Comunidad Valenciana había concitado gran expectación por lo atractivo del programa, integrado por el Segundo concierto para piano y orquesta de Sergéi Rachmaninov y la popular Sinfonía “Del Nuevo Mundo” de Antonín Dvořák. Para la primera obra se contó con la participación de la pianista indo-estadounidense Pallavi Mahidhara, formada en instituciones tan prestigiosas como el Curtis Institute of Music de Filadelfia, la Escuela Superior de Música Reina Sofía de Madrid o la Hochschule für Musik Hanns Eisler de Berlín, lo que hacía suponer una alta capacitación en el modo de afrontar el pensamiento musical  de Rachmaninov con una de las obras más representativas de su catálogo.

Desde los primeros acordes con regulador de creciente dinámica, se pudo apreciar que su sonido no era demasiado ampuloso y suficientemente gradado como requiere el prodigioso inicio de este concierto, llegando a justificarse de algún modo su acción en el progresivo lirismo que se sucedía en la obra, siempre cantado con moderado brío que no terminaba de equipararse con la intensidad sonora de la orquesta. De este modo transcurrió este movimiento sin llegar a la majestad que pide su aire, hasta que llegó la coda en la que Pallavi Mahidhara reafirmó su ligero mecanismo con mayor sentido. El maestro Abad Casanova mantuvo siempre la alternativa de dejar hacer a la solista logrando un proporcionado diálogo en los pasajes donde intervenía la sección de viento-madera, a la que supo orientar con sensitiva fluidez.

El Adagio central fue el tiempo mejor expuesto por el equilibrio alcanzado por ambos elementos concertantes en modulación, ritmo y ornamentación, destacando tal estabilización en su más animado episodio central, donde la pianista volvía a ofrecer unos destellos técnicos de adecuada velocidad sustentada en un ágil mecanismo. Fue en el comienzo del scherzante tiempo final donde surgieron ciertos desajustes métricos entre solista y orquesta, de modo más llamativo en sus staccati ritmados, hecho que se olvidó rápidamente ante la melodía de su parte central desarrollada primero por la orquesta y después por el piano, una de las que tanto identifican esta obra, siendo adecuadamente cantada y dialogada por ambas partes antes del brillante final.

En cuanto a la conocida sinfonía de Dvořák hay que valorar que el director se sintió más cómodo en su manera de transmitir el contenido de esta obra. Así se identificó mejor con la variabilidad temática que tiene el primer movimiento en su manifiesto deseo de ir resolviendo su desarrollo puesto el objetivo en conseguir la pertinente resonancia de su coda. Quiso destacar el aire americano del Largo, con una notable intervención del corno inglés que, entre otros compañeros, fue señalado por el director para recibir un más que merecido aplauso. Puso énfasis en el carácter de danza del alegre scherzo subsiguiente, cuyos motivos cíclicos quería como novar expresivamente a su paso por las distintas secciones instrumentales, para finalizar su interpretación imprimiendo el aire fogoso que pide el autor en el último movimiento, logrando de la orquesta gran densidad de sonido, de manera especial en la sección de viento-metal, que llevaba a imaginar una formación de mayor número de componentes, pues no llegaban al medio centenar. La ovación final llevó al maestro Abad Casanova a añadir una de las más populares danzas húngaras de Brahms que hizo las delicias del público que intensificó y alargó su aplauso.

José Antonio Cantón

Orquesta de Cámara de la Comunidad Valenciana.

Solista: Pallavi Mahidhara (piano).

Director: Daniel Abad Casanova.

Obras de Antonín Dvořák y Sergéi Rachmaninov.

Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA). 05-VI-2021.

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