Música clásica desde 1929

David Gómez
Diciembre 2024 - Núm. 989

David Gómez

Viddä, el piano que conmueve los corazones

El creador de los conciertos a la luz de las velas, el pianista y compositor David Gómez, saca nuevo disco con Warner Classics, “Viddä”. El reconocido pianista y compositor mallorquín, nacido en Wattwil (Suiza), con más de 20 años de trayectoria artística internacional, destaca por la excelencia de su música en su género clásico contemporáneo, instrumental y cinematográfico, y por sus conciertos como solista alrededor del mundo. Formado profesionalmente en Holanda, perfeccionando sus estudios en el Conservatorio de Rotterdam, “Viddä”, afirma, “es todo aquello que entra en ese infinito que cabe en una melodía. Incluye 14 preciosistas composiciones que rinden homenaje a situaciones cotidianas de mi propia vida, a emociones al recordar a familiares inmersos en los momentos más cotidianos de sus quehaceres”.

Como compositor es un apasionado narrador de historias con su piano, inspiradas en el amor más romántico, las experiencias de vida y la justicia social. Entre delicadas melodías, sonidos ambiente y silencios majestuosos, su música emociona, enamora y llega con intensidad a lo más profundo de las almas y los corazones, donde el piano encuentra un hueco para conmover a cada oyente.

 

¿Quién o qué le inspiró a seguir una carrera musical?

Mi madre tocaba el acordeón y gracias a su pasión por la música empecé a estudiar piano. Ella siempre ha sido y es una gran inspiración. Por otro lado, mi padre ha sido jardinero toda la vida, un verdadero artista. Siempre he tenido el apoyo incondicional de ambos. Son puro amor. En esta profesión es muy importante tener el apoyo familiar.

¿Quiénes o cuáles fueron las influencias más significativas en su vida musical?

Varios profesores: Marta Christel, Claudie Desmeules, Emilio Muriscot y Michael Davidson, pero en realidad las personas que más me inspiran para componer nuevas piezas son la “gente de la calle”, la gente común que se cruza en mi vida…

¿Cómo definiría su nuevo álbum “Viddä”, bajo el sello discográfico Warner Classics?

“Viddä” es todo aquello que entra en ese infinito que cabe en una melodía. Incluye 14 preciosistas composiciones que rinden homenaje a situaciones cotidianas de mi propia vida, a emociones al recordar a familiares inmersos en los momentos más cotidianos de sus quehaceres. Por ejemplo, la pieza Lili está dedicada a mi sobrina Lidia. La composición Crusset, que además fue grabada con la Orquesta Sinfónica de Budapest, está inspirada en la figura de la modelo española Rocío Crusset. Hay gente que me inspira cosas bonitas, sin más. Everything comes fue un encargo de una pareja de Granada. Deseaban dedicar una de mis piezas a su perrita Fújur, y así nació esta composición. Por otra parte, las composiciones de este álbum, bajo mi punto de vista, poseen una característica terapéutica, nos calma el alma y permite que nos veamos reflejados en una gota de agua que cae por la hoja de una planta para estrellarse contra la tierra seca, y así abrir la puerta de nuestros universos interiores.

¿Cuáles han sido los mayores desafíos/frustraciones de su carrera hasta ahora?

Cada día es un desafío porque nunca sabes lo que vas a crear. La soledad, por ejemplo, es muy complicada, especialmente cuando tu vida gira en torno a un instrumento solista como el piano. La felicidad llega cuando esos momentos de soledad se comparten con cientos de personas en el escenario.

¿De qué interpretación o de que grabaciones está más orgulloso?

No me gusta destacar ninguna en particular, porque en todas mis actuaciones y grabaciones imagino y espero que haya algo especial… Lo más importante es conmover a la gente. En realidad mis últimos cuatro trabajos discográficos, quizás sean los más completos (“Spring in the Dark” · 2021, “A Letter from Mars” · 2022, “Island Sessions” · 2023 y “Viddä” · 2024). En estos momentos tengo nueve álbumes de estudio, y siempre he tenido la gran suerte de trabajar con uno de los mejores productores británicos, Joe Dworniak. Y también para mí es un honor poder trabajar también con Warner Music en este mi noveno álbum titulado “Viddä”, bajo el propio sello discográfico Warner Classics. Estar en el mismo sello donde han pasado gigantes de la música clásica como Plácido Domingo o Maria Callas es para no creértelo. 

¿Cómo fue su experiencia como colaborador musical del programa “Saber Vivir” de la 2 de TVE?

Fue una experiencia muy grata, pero nos pilló en plena pandemia del Covid. El primer programa lo hicimos en el Hospital 12 de Octubre (Madrid). Toqué varias piezas para enfermos de cáncer. Hablé con ellos, intenté animarles a través de mi piano y energía. Todos coincidían en lo mismo. La música cura. Creo que deberíamos ser más conscientes del poder que tienen los sonidos. Deberíamos potenciar mucho más la educación musical en las escuelas. Tendríamos sin ninguna duda un mundo mejor. 

¿Cómo elige sus composiciones de una temporada a otra?

Siempre presento mis nuevas creaciones a través de mis conciertos “1 Piano & 200 Velas”. Me concentro en tocar básicamente mis propias composiciones, tanto las nuevas como las de álbumes anteriores. El concepto detrás de “1 Piano & 200 Velas” es crear una experiencia única en lugares y ubicaciones inusuales. Creé esta escenografía hace más de 20 años, y gracias a ella y a mi música he tenido el placer de actuar en más de 65 países. Desde la Ópera del Cairo, pasando por faros, castillos, cementerios, playas, pueblos abandonados, etc., al Carnegie Hall de Nueva York.

¿Tiene una sala o lugar favorito para ofrecer sus conciertos y por qué?

Para mí cada lugar es especial y tiene su propia magia. Las velas que llevo en mis actuaciones hacen que los espacios sean aún más etéreos y permitan mejorar la experiencia auditiva del público debido a la belleza de la luz danzante.

¿Quiénes son sus músicos favoritos?

Casi no escucho música para no embriagarme con otras melodías, y así lo que nace es o suele ser auténtico. Sin embargo, disfruto de la música de Yann Tiersen y Ennio Morricone. Por otro lado está Johann Sebastian Bach: su música lo contiene todo: belleza, equilibrio… me inspira felicidad.

¿Cuál es su experiencia de concierto más memorable?

Tengo muy buenos recuerdos de conciertos en México con el público en pie  gritando “¡bravo!”… ¡Fue muy emocionante! También recuerdo con mucho cariño mi primera gira asiática donde ofrecí cinco conciertos por la India, aquel recuerdo será imborrable. El concierto que ofrecí en Calcuta, con un 100% de humedad y 45 grados centígrados, fue memorable. El piano, un gran cola Steinway, ya os podéis imaginar, sonaba a lata de anchoas, con lo cual tuve que hacer lo imposible por intentar hacer música. La respuesta del público fue preciosa. Había una necesidad vital de escuchar música en vivo. Fue muy especial. 

¿Cómo caracterizaría su lenguaje compositivo?

Íntimo y directo al corazón.

Como compositor, ¿cómo trabaja?

¡No trabajo jajaja! Simplemente, la música sale de algún lado. Si te ilusionas y emocionas, ahí está.

Como músico, ¿cuál es su definición de éxito?

Un músico tiene éxito cuando es capaz de emocionar a millones de personas con su música y esa música se convierte en la banda sonora de la vida de todos…

¿Destacaría algún proyecto que tenga en mente?

El próximo 20 de julio de 2025 actuaré sobre una plataforma en el lago del Parc de la Mar (Palma de Mallorca), junto a 2.000 velas flotantes. También quiero hacerlo en el Parque del Retiro de Madrid. Además tengo otro proyecto titulado “Le Voyage du Piano”, donde actúo en movimiento sobre una plataforma móvil (grúa), paseándome por las ciudades con mi piano y 200 velas. Creo que es una bonita forma de sacar la música a la calle. 

¿Qué es para usted la música?

Es complicado definir algo tan necesario. Siempre digo que: “Music is the best airline. You can fly wherever you want” (“La música es la mejor aerolínea; puedes viajar allá donde quieras”) y también hay otra cita que se me ocurre ahora mismo: “La mejor música es la que imagino en silencio”. Espero haber contestado a su pregunta. 

¿David Gómez tiene algún hobby?

Pues me encanta leer. La verdad es que leo bastante. Me gusta mucho la novela. Acabo de leerme La ciudad y sus muros inciertos, de Haruki Murakami, y ahora mismo estoy leyendo Cuando la tormenta pase, del escritor gallego Manel Loureiro. También me encanta hacer deporte. Dedico dos horas al día, entre ir al gym, hacer elíptica, etc., creo que es importante sentir un equilibrio entre el cuerpo y la mente, para así ofrecer tu mejor versión.  

¿Algún pianista que le haya marcado?

Mi formación ha sido clásica. Estudié en el Conservatorio de Rotterdam (Holanda) durante muchos años. Para mí, los dos genios del pianismo han sido Glenn Gould y Vladimir Horowitz. Dos grandes pianistas que aportaban magia a sus interpretaciones. Por mi parte, curiosamente he pasado de interpretar la integral de las Sonatas para piano de Wolfgang Amadeus Mozart en muchas ocasiones, a componer y tocar únicamente mi música. Al final en la vida tienes que hacer lo que te haga sentir más feliz, y eso intento hacer siempre. 

¿Qué siente cuando se sienta delante del piano?

Siempre digo que donde más seguro me siento en este mundo es delante del piano. Es como sentirse a salvo. Deberían llover pianos para que así todos estuviéramos a salvo de las guerras, enfermedades, etc. En ese momento me siento desnudo, porque sale a relucir mi verdadera esencia. Soy tal cual interpreto al piano. Muchas veces nos cuesta mostrarnos tal y como realmente somos. Con la música no hay engaños. 

¿Cuáles son sus metas o sueños para el futuro?

Hacer la banda sonora más escuchada de la historia. Seguir emocionando a mucha gente y seguir disfrutando de lo que hago. Y si algún día gano un Óscar, no quiero ser muy viejo, no quiero perderme la fiesta posterior… jajaja… Ah… y se me olvidaba, ¡encontrar al amor de mi vida! (más risas). 

¿Con qué director de cine cree que encajaría su música?

Creo que con cualquier buena película de autor. El cine francés me encanta, y por supuesto, Woody Allen. No hay nada más bonito como recordar un film por su música. Creo que en España los directores no dan mucha importancia a la música en sus películas. De hecho, dudo mucho de que la gente recuerde una película española por su música, y eso debería cambiar. La música es el 50%, o más…

¿Por qué creó “1 Piano & 200 Velas”? ¿Cómo surgió?

Surgió en mi etapa de estudiante en Holanda, hace más de 20 años. Consideraba que el típico concierto de piano al uso, se estaba convirtiendo en algo obsoleto. Si no eres Daniel Barenboim es complicado atraer al público para que te escuche, y así fue como creé este proyecto. La escenografía y los espacios eran el gancho perfecto para que la gente empezara a conocer mi música, y así fue. Ahora la inmensa mayoría acude por el conjunto de las tres cosas. 

¿Qué es lo mejor y lo peor de tocar en espacios originales?

Lo mejor es que me siento como en casa, y eso es vital para ofrecer lo mejor de uno mismo. Lo peor quizás sea la acústica, que no siempre es la deseada, pero como bien sabemos, no podemos tener todo en la vida.

¿Qué representa para usted el piano?

El piano no deja de ser un mueble, pero es un mueble mágico, en el que con tus manos, corazón y cuerpo debes ser capaz de transmitir emociones. Cualquier artista de este mundo, cuándo sale al escenario, intenta dar su mejor versión. Hay mucha gente que va a los conciertos para únicamente criticar. Dudo que con esa actitud sean felices. Creo que es un comportamiento cobarde. No podemos hacer felices a todos, de eso hay que ser conscientes. Desde aquí les deseo todo lo mejor.

¿Qué otras cosas le ha aportado la música?

He tenido la gran suerte de viajar mucho y actuar en escenarios que jamás habría imaginado. Realmente me ha aportado mucho viajar. Gracias a ello me considero una persona abierta y con valores. He actuado en países como Irán, Zimbabwe, Arabia Saudí o Palestina, entre muchos otros; viajes y conciertos que no se borrarán nunca de mi mente ni de mi corazón. He conocido a gente maravillosa. 

Si no se hubiera dedicado al piano, ¿qué le habría gustado hacer?

Creo que siempre hay un camino en la vida. Me habría encantado ser actor, cantante, escritor, pintor, etc.; hay tantas cosas bonitas que uno puede hacer, que son interminables. Siempre digo que un día haré mi propia película, haré la banda sonora, actuaré como actor, y dirigiré el film (risas), como el dicho ese que dice: “Juan Palomo, yo me lo guiso y yo me lo como”, pues tal cual (más risas). 

¿Qué siente como creador de “1 Piano & 200 Velas”, al ver que hay gente que copia e imita su puesta escenográfica?

Pues es un sentimiento extraño. Siempre pienso en esta frase: “es mejor fallar en originalidad que triunfar en imitación”. Cuando ves de forma clara una posible infracción de tus derechos de Propiedad Intelectual, te quedas sin palabras, es como si te robaran un trocito inmenso de tu propio corazón.  

¿Cómo le gustaría ser recordado?

Principalmente como alguien honesto y humilde. Creo que estos valores están muy por encima de cualquier logro a nivel profesional. He crecido en una familia donde comprar un piano supuso un esfuerzo inmenso. Los valores que me han enseñado en casa, siempre estarán presentes.

Muy a tener en cuenta sus reflexiones. Gracias por su tiempo y por su música, ha sido un placer.

por Diana Blanco

 

1 Piano & 200 Velas

Con una puesta en escena muy cuidada y exquisita, el reconocido espectáculo “1 Piano y 200 Velas” de David Gómez demuestra la originalidad, el encanto y la magia de su carácter soñador, auténtico y emotivo, impredecible y desbordante de sorpresas. Bajo el cielo estrellado y a la luz de las velas, sus actuaciones en directo al igual que su música y sonido, son poderosas y de gran calidad. Cuando David se sienta al piano es una experiencia celestial, deslumbra tanto por el placer y la entrega que transmite al tocar su instrumento, como por la conexión tan íntima, sensible y espiritual con que su música llega al corazón del público que lo admira.

La gira de conciertos espectáculo “1 Piano y 200 Velas” es para los amantes de la música de calidad, de los ambientes románticos y especiales: faros, iglesias derruidas, cementerios, edificios abandonados, estaciones de tren, ruinas históricas, playas, etc.

 

1 Piano y 200 Estrellas

Con una puesta en escena muy cuidada y exquisita para teatros, el precioso espectáculo “1 Piano y 200 Estrellas” de David Gómez demuestra la originalidad, el encanto y la magia de su carácter soñador, auténtico y emotivo, impredecible y desbordante de sorpresas. Bajo el cielo estrellado y a la luz de las velas, sus actuaciones en directo al igual que su música y sonido, son poderosas y de gran calidad.

 

Le Voyage du Piano

Rodeado de sus más de 200 velas y sobre una plataforma móvil, David Gómez pasea su música por las calles de la ciudad. El espectáculo hará viajar a todos los viandantes que se topen con su piano móvil a un mundo mágico y de ensueño.

 

https://davidgomezpiano.com

 

Foto © Pere & Marga

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