Con la noticia de hace unas semanas del cese de Robert Treviño como titular de la Euskadiko Orkestra, este CD de la serie Americascapes constituye su último legado discográfico con la formación vasca, prosiguiendo, de nuevo, con un ramillete de obras de versos sueltos: músicos que, por diversas vicisitudes, quedaron fuera del circuito principal. Es el caso del afroamericano George Walker (1922-2018), de quien Treviño presenta, por voluntad del compositor, su Address for Orchestra de 1959, apolíneo y muy accesible estudio sinfónico tripartito que recoge la métrica stravinskyana y una concentrada dramaturgia no alejada de la de Carter en sus Variaciones para Orquesta.

Estrenada por la Orquesta Filarmónica de Nueva York, A Haunted Landscape de 1984 sintetiza el mundo sonoro del también estadounidense George Crumb (1929-2022). Profuso en especulación tímbrica, técnicas ampliadas y una estática expresión camerística, la música de Crumb, en cambio, expone amplias resonancias sobre la dialéctica poética entre la distancia y la memoria como expusiera en Star child, Vox Balaenae, Black Angels o Makrokosmos. El inmediato y telúrico estilo del mexicano Silvestre Revueltas (1899-1940), visto aquí mediante su cinético ballet La Coronela (1940), en arreglo final de José Limantour, cierra un fantástico registro de Ondine de superlativa toma sonora, traducido por un Treviño en contexto y sintonía con este repertorio mejorando los escasos registros previos de estas creaciones. Muy recomendable.

Justino Losada