Música clásica desde 1929

 

Críticas seleccionadas de conciertos y otras actividades musicales

 

Crítica / Kind of Concerto, estreno absoluto de Nuno Côrte-Real - por José M. Morate Moyano

Valladolid - 08/02/2022

Nuevo encargo de la OSCyL estrenado en su Abono Enero-Junio 2022, previsto para 2020 y aplazado por la Covid-19, ocupando por fin su lugar como 3er. concierto de este Abono. Este Kind Concert (Especie de Concierto), op. 65 del lisboeta Nuno Côrte-Real (1971), Director y fundador del Ensemble Darvos, compositor fecundo (lleva 3 óperas) y varias grabaciones, tuvo como solista al tubista José Manuel Redondo Contreras (Alhama de Granada, 1969), que lo es también en la OSCyL desde 1971, con amplia experiencia concertística y pedagógica en Europa y USA y Premio "Alhameño Oriundo" en su ciudad natal en 2017. Estuvo al frente como Invitado por 6ª vez, Jaime Martín (Santander, 1965), actual Titular en las Orquestas de Cámara de Los Ángeles, de la RTE National del SO de Irlanda, de la Sinfónica de Melbourne y Principal Invitado de la ONE.

Al tener por 6ª vez a este Director (sobresaliente solista de Flauta antes), hemos podido seguir su evolución en el podio desde la 2008-09 hasta hoy, y hay que reconocer que su progreso ha sido enorme, pues conservando la sensibilidad y conocimiento musical que siempre tuvo, ha sumado oficio y experiencia en el atril, hasta convertirlo en notable Maestro con importante agenda, como prueban las titularidades e invitaciones que cubre con un intenso trabajo. Es notorio también su carisma personal que le permite conectar con los músicos y aunar criterios con alto rendimiento.

José Manuel es un enamorado de la Música y de su instrumento; baste señalar que la tuba que ha utilizado en este estreno ocupa el 11º lugar en su colección, que incorpora aleaciones  (ahora latón clásico y titanio) de manos de un artesano alemán con el que busca mejorar peso y color de sonido y que sigue cultivando su técnica con los mejores especialistas del mundo.

Con estos mimbres, el Kind of Concert de Côrte-Real resultó un completo éxito. La estética del compositor, sin dejar de lado la técnica compositiva de hoy e incluso aportaciones novedosas, no abandona los patrones  clásicos tratados de forma personal y pleno respeto. Así sus 3 movimientos: Ritornello's Groove (El ritmo del ritornello), Lydian Fantasy (Fantasía lidia) y To Miles (A millas de distancia), con la tuba haciendo melodía tras la suave introducción de la orquesta mezclando estilos, acompañando ahora a distintos tempi y tomando el tema de la tuba que lo soporta en los graves, se aborda amplia cadencia a solus, variando el tema con complicaciones dinámicas , de afinación y tesitura, resuelta con solvencia y limpieza; juegos comunes con el tema en distintas tímbricas (suena breve cita de "La vida es bella") y despedir juntos el movimiento.

El 2º se inicia con arpa, cuerdas y celesta a los que se suman las flautas, para que la tuba introduzca una bella melodía muy expresiva en toda la tesitura y las cuerdas añadan otro luminoso tema con la flauta al que se suma el solista que, tras un preciso reposo, vuelve con nueva tímbrica enriquecida con la celesta en estupendo papel. El movimiento final es un guiño al álbum de Miles Davies "Kind of Blue" en el que se inspira el título del Concierto al tener al jazz como espejo; la batería marca el ritmo al tutti, diálogos tuba-cuerda-piano y todo tipo de tempi y asociaciones con el resto de familias orquestales para un vibrante final, que provocó ovaciones en el público que llenaba la Sala y que disfrutó de la pieza (con el autor presente), del solista que estuvo fantástico en este inusual papel y de un Director que controló a la perfección todas los momentos.

Completaba el programa la Sinfonía nº 11 en Sol m., op. 103, "El año 1905", de Shostakovich, en su 4ª vez para la OSCyL. La competencia era fuerte porque V. Petrenko y E. Inbal la habían planteado antes con marcado éxito, pero Jaime Martín no se quedó atrás. Su personalidad y entrega hicieron una versión muy válida, quizá un punto menos incisiva pero muy musical, atento y dejando sonar todos los múltiples efectos que ofrece, con un sonido orquestal colorido, uniforme y de calidad, a lo que contribuyó todo el orgánico y destacados solistas como el timbal, flauta, el trompa magnífico en pianísimo como todo el elenco, contrabajos, trompeta, píccolo, trombones, tuba, percusión, arpa y celesta, violas, caja, corno inglés, fagot y clarinete bajo, que fueron sucediéndose en los 4 movimientos.

Los 9 de los "10 Poemas corales sobre textos revolucionarios" op. 88 del autor, que van ilustrando y dando sentido a esta obra, desde el "Escuchad" y "El prisionero" iniciales hasta "Rabiad, tiranos" y "La varsoviana" finales, tratados con mano maestra ahora sólo instrumentales, describen ese afán de libertad y pena por las penas y muerte que toda Dictadura produce, que Martín entendió y trasladó a músicos y oyentes con gesto claro y dedicación individual, provocando lógico encanto en el Auditorio muy celebrado en aplausos colectivos e individuales y repetidas salidas.

José M. Morate Moyano

 

José Manuel Redondo, tuba.

Orquesta Sinfónica de Castilla y León / Jaime Martín.

Obras: Nuno Côrte-Real y Dmitri Shostakovich.

Sala sinfónica "Jesús López Cobos" del CCMD de Valladolid.

653
Anterior Crítica / Música con mujeres y con humor - por Genma Sánchez Mugarra
Siguiente Crítica / Gluck al modo de Carlos Mena - por Ramón García Balado